miércoles, 13 de julio de 2022

Io resto qui! Juana y Julieta, integradoras sociales en Génova

Hola, mi nombre es Juana, soy estudiante de integración social y recientemente he finalizado mis prácticas en Génova, Italia, gracias al programa Erasmus.



Los meses anteriores al viaje, y teniendo en cuenta el contexto de la pandemia global, que dificulta aún más las cosas, estuvieron llenos de incertidumbre, algo que me causaba absoluto pavor. ¿A qué empresa iría, cómo sería, con quién trabajaría, me gustaría o no, les gustaría yo a ellos…? En definitiva, la cuestión principal era si estaría a la altura de embarcarme en una experiencia de este tipo, y si sería capaz de gestionarla, no solo teniendo en cuenta la diferencia del idioma (del cual no tenía ni idea antes de ir) o del estilo de vida, sino también, por supuesto, pequeños problemas que la vida te plantea y con los cuales tienes que lidiar, independientemente de dónde te encuentres.

 Por ello, fue para mí una suerte inimaginable el encontrarme con una entidad que destaca no solo por su profesionalidad, sino por su cercanía. Me sentí como en casa desde el primer día. Todo el equipo de trabajo se esforzó por facilitarme la adaptación tanto como fuera posible, desde ayudarme con el idioma hasta explicarme detalladamente cada parte del trabajo, sin importar cuánto tardase en entenderlo. No teniendo experiencia previa en el trabajo con menores, me sentía muy intimidada, pero afortunadamente me encontré en un ambiente en el que todas y cada una de las personas tenían buenas intenciones y ganas de enseñarte, siempre que tú tuvieses ganas de aprender, algo que considero que no me faltaba. Incluídos las niñas y los niños, de quienes siento que he aprendido una barbaridad. Todo esto además del increíble ambiente general que hay en Génova, donde siempre hay cosas que hacer y gente a la que conocer.

Antes de comenzar este viaje ni siquiera podía imaginar todas las cosas que estaba a punto de aprender, y ahora, habiendo finalizado, no puedo esperar a ampliar estos conocimientos y ponerlos en práctica. A cualquier alumna o alumno que tenga la posibilidad de plantearse el emprender este viaje pero que tenga miedo de hacerlo, no lo dudéis ni por un segundo, porque lo que ese miedo no os cuenta es que, tanto a nivel profesional como personal, estáis a punto de vivir una experiencia inolvidable, en el mejor sentido posible. Y la mejor forma de entender a qué me refiero no es con una explicación en pocos párrafos, es, si es posible, viviéndolo.



Soy Julieta y después de mi experiencia de Erasmus+ en Génova puedo decir que he descubierto una 
ciudad peculiar y muy curiosa que me está conquistado il cuore. Además, y a partir de mis prácticas en una comunidad social genovesa, he conocido a un montón de personas creativas e interesantes con ganas de aportar a la comunidad.

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